Patrones para una comunicación saludable
No existe una solución única para muchas personas y equipos. Solamente hay momentos específicos en los que intervenir.
Bienvenido, bienvenida a Rodobo, un boletín quincenal que explora la relación entre el diseño de producto, la experimentación, analítica y las empresas.
Hola, ¿cómo estás?
Aquí Juan Rodriguez Talavera con una edición más de este boletín.
Primera después de las vacaciones. En verano es cuando más tiempo suelo coger de descanso. Este año han sido dos semanas en las que he dedicado mi tiempo a descansar, alejarme de las redes sociales, y disfrutar de los días.
También hay una sensación que me ha acompañado en la vuelta a la rutina en los últimos años, y es que puede que a la vuelta de vacaciones sea una persona más susceptible. Por eso he procurado seguir haciendo mucho deporte, y a pesar de lo que pueda dudar de mí mismo, concentrarme en lo que sé hacer.
Y en esas estamos. Tal vez este tema dé para una edición aparte. ¿Tú que opinas? Mientras tanto, y como siempre, el envío anterior, “Tomando un descanso”, está disponible en este enlace.
Conversaciones
Con Pepe Martín, CEO de Minimalism, sobre salud mental.
Empecé este podcast en octubre de 2020 con Victor Rodado de Minimalism para hablar de cultura y propósito. 30 episodios después, esta aquí al otro lado Pepe Martín, compañero de Victor y CEO de Minimalism para hablar sobre salud mental.
Entre otros temas, hablamos de:
La importancia de descansar y desconectar
La historia de Pepe y cómo se da cuenta de que ha roto mentalmente
Cómo te recuperas del burnout
El papel del deporte para cuidarte
La búsqueda del equilibrio personal
Qué es el éxito para Pepe
El papel de Victor Rodado, su socio, en todo esto
Te dejo el episodio en este enlace, y aquí abajo, para que puedas darle al play y escuchar.
Patrones que fomentan una comunicación saludable
En el envío anterior comentaba en Twitter que estaba investigando sobre comunicación en equipo.
En esa investigación descubrí la ley de Metcalfe, la cual, según su página de la Wikipedia dice que el valor de una red de comunicaciones es proporcional al cuadrado al número de usuarios conectados al sistema (n^2). Es decir, que a medida que un equipo crece linealmente, el número de líneas de comunicación crece exponencialmente.
Me llamó especialmente la atención porque estoy convencido, y más después de alguna respuesta a ese mensaje en Twitter, tanto en público como en privado, que todas las personas se han sentido frustradas en algún momento por la cantidad de partes interesadas que hay en una toma de decisión.
Seguro que te suena la palabra burocracia, ¿verdad? Y que en alguna ocasión te has sentido atado a ella. Si no, tienes mucha suerte. Y es que, las grandes empresas nos entrenan, sin querer, para creer que en el trabajo hay ocasiones en las que nos debemos ver bloqueados por decisiones, aprobaciones o consensos de liderazgo en la que se lleva a cabo micro-gestión.
Además de una sensación de que siempre debemos estar trabajando y tener tareas encima de la mesa, cuantas más, mejor. No estoy diciendo que no haya que tener trabajo sino que, mientras que tenemos un proyecto o tarea que está esperando que se tome una decisión, empezamos otro trabajo, lo que lleva a más trabajo en proceso. Esto se convierte a su vez en más cosas que necesitan ser aprobadas, y en última instancia, en una espera más larga.
Y más trabajo para rellenar espacios para que la gente no esté ansiosa. Y luego nos preguntamos por qué estamos todos tan ocupados todo el tiempo.
Muchas personas interesadas, ningún responsable
Los patrones de comunicación disfuncionales toman muchas formas. John Cutler lo explicaba perfectamente, mejorar los patrones de comunicación depende de la disfunción específica que estés intentando mejorar.
No existe una solución única para muchas personas y equipos. Solamente hay momentos específicos en los que intervenir. Más abajo en los recursos tienes una lectura relacionada con ello.
Tras leerla, creo, en mi opinión, que hay intervenciones específicas que producen patrones más saludables. Vamos a verlos y tú ya decides con cuál te quedas:
Problema, objetivo y estrategia
Siempre he dicho que hacer producto se basa en gran parte en hacer apuestas, experimentar, probar, fijar métricas de éxito, analizar y seguir apostando.
Y sobre todo, pasar tiempo real en ello. Para algunos equipos, esto podría parecer algo muy lento, pero los equipos se mueven rápido cuando hay una estrategia clara con la que todos están muy alineados.
Han entendido el problema al que se enfrentan, han llegado al consenso de un objetivo y elaborado una estrategia clara. Y con una estrategia no me refiero a un documento de muchas páginas sino a justo lo que comentaba hace meses en este mensaje en Twitter.
Lo que quiero decir con esto es que lleva mucho más tiempo terminar un proyecto cuando no entiendes el problema, y los objetivos no están claros ni alineados con la estrategia. Entiende el problema, fija un objetivo, y crea una estrategia.
Más abajo en recursos tienes un framework que usa Spotify para esto que comento.
Haz más retrospectivas, revisa con frecuencia problema/objetivo/estrategia
Esta parte es algo de lo que hablamos más de lo que hacemos. Todos decimos que hay que hacer más retrospectivas, pero al final nunca se hacen. Y lo único que puedes hacer para solucionar esto es reservar ese hueco en el calendario. No importa que hayas finalizado o no un proyecto. Las retros también sirven para revisar las suposiciones, hipótesis y estrategia inicial del proyecto.
¿Cuándo hacerla? A mitad del proyecto, mensualmente, trimestralmente, cuando sea, lo importante es hacerla. Si quieres saber más sobre retrospectivas, tengo una edición sobre ello, incluso otra sobre cómo planificar, que bien podría servir para este punto.
Menos reuniones, más trabajo en el barro
Vale, sé que en el punto anterior hablaba de reuniones, pero en este punto trataré otra perspectiva.
Tener muchas reuniones con muchas personas “interesadas” hace que inmediatamente todos se sientan obligados a asistir. La semana se nos llena de “estatus de proyectos” y poco espacio para trabajar en equipo en esos proyectos.
Pregúntate si necesitas tener una reunión y bloquear ese espacio mental. No sé tú pero yo si la reunión es de 1 hora, en mi cabeza es de 1 hora y 30 minutos, por el tiempo que me lleva mentalmente prepararme para ello.
Siempre recomiendo evitar adelantarnos a las reuniones que creemos que podríamos necesitar. “¿Qué hay en la agenda?” es una de esas preguntas que más me hago de forma recurrente desde que trabajo en remoto. Para añadir reuniones siempre hay “tiempo”. Al final se trata de proceso mínimo viable. En el enlace te dejo una reflexión que hice sobre ello.
Comparte tu trabajo con los demás
Me gusta mucho el movimiento #buildinpublic que se generó en Twitter y creo que tenemos que aprender mucho de ello a la hora de comunicarnos dentro de una empresa. La idea principal es cambiar la opción predeterminada de compartir trabajo hecho y empezar a compartir el trabajo que estás haciendo.
Una de las descripciones preferidas al respecto de esto es que las personas creativas y colaborativas se comunican como si estuvieran “trabajando con la puerta del garaje abierta”. Es mucho de pensar en voz alta sobre las formas en las que un proyecto está o no funcionando, y cómo podemos mejorarlo.
Tiene que ver mucho con Twitch y por qué Youtube ya no es lo que era y los grandes creadores de contenido se han ido a su plataforma. Quiero ver el proceso, quiero verte en el momento. Y esto lo aplicamos a la forma en la que nos comunicamos con el resto del equipo.
No obstante, cuando trabajamos “con la puerta del garaje abierta” invitamos a que otras personas den su opinión, beneficiamos a los que están trabajando en algo similar, nos nutrimos de ideas, y sobre todo, y la más importante para mi, creamos conexiones fortuitas y sinceras.
Sentido de la responsabilidad
En equipos pequeños o en equipos más grandes, esto es algo que he aprendido y que he mejorado con el paso del tiempo, y que sin embargo, sigue siendo algo recurrente para mí siempre que empiezo un nuevo trabajo o un proyecto. Siempre hay que dejar claro quién es el responsable de qué. No es por nada sino porque refuerza la definición de lo que estás creando, se generan vías de comunicación y todo el mundo tiene claro cuál es su papel.
En minimum, por ejemplo, nos dimos cuenta que si bien en la fase de definición necesitamos introducir a las personas correctas, no siempre todas deben estar en ella, sino que siempre podemos incluir a más partes interesadas una vez avance el proceso, según la fase y las habilidades que se necesiten para resolver problemas y retos que son muy específicos de cada cliente.
Si la responsabilidad no funciona, cambia de perspectiva
Buscando información al respecto sobre este tema di con un artículo de Clay Parker Jones en la que explica que la mayoría de organizaciones utilizan un método llamado RACI, acrónimo de Responsible, Accountable, Informed y Consulted.
La propuesta de Ray pasa por modificar Responsible y Accountable por Decides y Executes basándose en que el uso de “responsable” es demasiado vago. Decidir y Ejecutar, por otro lado, son específicos.
Si bien, creo que muchos problemas de comunicación se basan en que muchas organizaciones no están ni siquiera alineadas sobre quién decide y quién ejecuta, este puede ser un buen inicio para mejorar comunicaciones.
Conclusiones
Hecho es mejor que perfecto.
No hay otra conclusión posible en este momento. O si, quién sabe. Y es que mejorar los patrones de comunicación de un equipo se puede hacer de muchas formas. Lo que he escrito antes son algunas ideas que pueden servir y que, sin duda, son un lugar para empezar, no para sentar cátedra.
Al fin y al cabo, si tu objetivo es “hecho mejor que perfecto”, no te preocupes de que la comunicación sea perfecta sino que enfócate en impulsar el trabajo en equipo, procesos, compañerismo, momentos para la reflexión, etc.
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Lo que he leído/escuchado estas semanas
Una frase
“Sin datos, estás ciego, sordo y en medio de una autopista”. – Geoffrey Moore
Construyendo en público
Vamos con las métricas de Rodobo, a fecha del lunes de 05 septiembre a las 19:30 horas.
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Tasa de apertura de la edición anterior: 59%
Visualizaciones de la edición anterior: 722 visualizaciones totales.
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La foto de portada la hice en El Palo, Málaga, el pasado mes de agosto 2022 con una Canon Prima Mini II. Me pareció curioso que todas las sombrillas de la playa tuvieran el mismo patrón y color. En mi mente, la foto quedaba mucho mejor, he de reconocerlo. Una pena que se haya cortado por abajo, en el visor salía un poco más de arena y playa.
Nada más, nos leemos en 15 días.
Gracias.