Todo es cuestión de perspectiva
Pensar en qué influencia tu perspectiva y ver dónde se superpone o diverge de los de los demás puede ayudar a alinear lo que ambas partes esperamos.
Bienvenido, bienvenida a Rodobo, un boletín quincenal que explora la relación entre el diseño de producto, la experimentación, analítica y las empresas.
Ayer, lunes 20 de noviembre, fue mi cumpleaños. Normalmente no lo diría ni lo escribiría aquí si no fuese porque en estos últimos 15 días he estado más desconectado de esta newsletter, por lo que en esta ocasión haré una edición más corta. Y toca escribir sobre perspectiva. Vamos al lío. Pero antes, un nuevo episodio del podcast.
Conversaciones
Con Pablo Mazón, CEO de Movertis.
Leer a Pablo en Twitter es un chute de energía y motivación. Su historia está llena de esfuerzo, constancia y de creer en lo que estás haciendo. Y a mí personalmente me gusta porque desmitifica que emprender sea fácil. Entre otros temas hablamos de:
Qué ha cambiado desde que en 2009 alquiló su primera oficina
Ser constante en todo lo que haces
Planificación a largo plazo y gestión del riesgo
Cómo delegar y establecer procesos
Tener mentalidad de mejora continua
Eliminar la CEO-dependencia
La importancia de la cultura organizacional
Equilibrio entre vida y trabajo para estar al 100%
Muchas gracias Pablo, me llevo muchos aprendizajes. Dejo la conversación en este enlace y aquí abajo.
Cuestión de perspectiva
Hace un tiempo, hablando sobre reuniones de trabajo, dije que nunca entro a una llamada sin preguntarme qué quiere la otra persona. Una pregunta muy simple y sencilla pero que nos obliga a involucrarnos con la perspectiva de los demás.
Es importante porque la perspectiva subyace en nuestras acciones. Subyace en cómo nos comunicamos y en lo que elegimos enfocarnos. Los errores, malentendidos, barreras y fricciones que encontramos en nuestros intentos por comunicarnos a veces se pueden atribuir a perspectivas desalineadas.
Por eso he aprendido que entender la diferencia entre cómo ves las cosas y por qué las ves de esa manera, en comparación con cómo y por qué lo hacen las demás personas es fundamental para comunicarnos. Y no solamente en el trabajo sino también en entornos personales.
En esta ocasión quiero escribir sobre los factores que he aprendido, siempre en base a mi experiencia, determinan nuestras perspectivas en el trabajo y sobre el trabajo. Y es que creo que si entendemos lo que influencia esa perspectiva, evitaremos problemas que surgen cuando estás falto de ella.
Los influenciadores de la perspectiva
Entender la perspectiva de una persona en un momento determinado es importante para saber cuál es su forma de pensar y lo que espera que ocurra.
No obstante, todas las personas tenemos objetivos, queremos que ocurran ciertas situaciones y nos imaginamos, por ejemplo, en el contexto de una reunión, salir de ella y que tenga que haber pasado una serie de acciones. Esas acciones, lo que esperas, tu perspectiva, está influenciada por algunos factores. Si quieres agregar alguno más, déjame un comentario.
Historial y preferencias profesionales
Nuestras experiencias nos moldean. Si solo has trabajado en empresas grandes, tu pensamiento sobre lo que se puede hacer en un período de tiempo específico será diferente a la de alguien que ha trabajado en una startup.
De igual forma, tus creencias sobre lo que se puede y debe hacer en el trabajo a veces se filtran a través de esas experiencias pasadas. ¿Has pensado en qué suposiciones podrías tener y que no son del todo útiles? Alguna que otra vez he comentado por aquí que en los últimos dos años he tenido que aprender a hacer en días lo que anteriormente hacía en meses. No hay escenarios positivos ni negativos sino que son perspectivas.
Y nuestras perspectivas a veces se ven influenciadas por nuestras habilidades. Cuanta más confianza tengamos en un enfoque determinado, más creeremos que es el mejor. La sabiduría previa que han formado nuestras capacidades puede moldear nuestra perspectiva sobre lo que es alcanzable.
Siguiendo con el ejemplo anterior de tener que aprender a hacer en días lo que anteriormente realizaba en meses, las preguntas que me hice por aquel entonces fueron relacionadas a cómo están afectando mis capacidades a la forma en la que percibo una tarea, un problema, y de qué forma cambiaría eso si reconsiderase todo desde cero.
Y aquí tiene especial importancia el estilo de trabajo que te hayas creado. Las personas orientadas al contexto ven lo que es importante de manera diferente que las personas orientadas a la tarea, que están más motivadas por lo que pueden conseguir que por la visión. En este sentido pienso mucho en cómo podría un estilo de trabajo hacerte ver la situación de manera diferente a los demás.
Cómo es la organización para la que trabajas
Danny Saltaren me habló una vez de ventaja organizacional. Es decir, lo que consideras importante dentro de una organización está moldeado por tu conocimiento de esa organización. Las personas de diferentes niveles y equipos tienen perspectivas diferentes. Lo que yo pensaba que es importante para Minimum en mis primeros días de trabajo, ahora ha cambiado con el conocimiento que tengo de los procesos, el negocio y de las personas.
Esto ocurrió en un cliente con el que trabajé hace poco. Lo que es importante para ventas, no lo era de igual forma y prioridad para el equipo de marketing. Lo interesante de este punto es qué información conoces que te brinda una perspectiva única y qué información podrías estar omitiendo que haría cambiar tu perspectiva.
En la organización en la que trabajas también son importantes los incentivos, porque los “choques” de perspectiva a menudo son de incentivos. Los incentivos de estos equipos pueden estar en desacuerdo.
Algunas empresas recompensan la innovación, otras dicen que lo hacen pero en realidad recompensan mantener el statu quo. Los incentivos pueden variar ampliamente dentro de una misma organización. Lo interesante aquí es entender de qué forma influye en tu perspectiva lo que estás personalmente incentivado a hacer. Y pensar en que si seguirías considerándolo si se eliminase ese incentivo.
Tu forma de ser
A veces, nuestras acciones son un reflejo de nuestros valores, ya sean los que son propios para nosotros o los que hemos aprendido de la experiencia. El punto aquí es pensar en cuánto están influyendo tus valores en tu perspectiva sobre una decisión.
Como también la motivación. Hace unas semanas hablaba sobre la diferencia entre las tareas que me gustan hacer, las que me importan y las que realmente quiero hacer. La motivación importa aquí porque en cada escenario, una persona motivada verá una situación de manera diferente a alguien a quien no le importa. Lo importante, en términos de perspectiva, es plantear hasta qué punto determinan tus ganas de hacer algo la perspectiva que tienes, de por ejemplo, una reunión.
Y donde menciono motivación, también hay que hacerlo del ego, de la avaricia y de la falta de autoconfianza y de otros muchos factores que alteran nuestra perspectiva, como por ejemplo, hacer una tarea por miedo a perder tu trabajo. El punto aquí es pensar en lo que nos impulsa y en cómo cambiaría la perspectiva si se re-enfocaran.
No menos importante, la situación en la que estás también afecta
Cómo descansas, si te sientes cansado, aburrido, el entorno de trabajo que has creado, especialmente en remoto, como también si tienes una llamada importante e incluso si acabas de salir de una y no ha ido como esperabas.
Sea como sea, nuestras perspectivas también pueden verse influenciadas por momentos actuales. El punto aquí es entender si realmente sientes esa perspectiva, si la tienes de esa forma, o si está “alterada” por un buen o un mal día.
Como siempre, al menos por ahora, unas pocas conclusiones
La conclusión de todo esto es sencilla: pensar en qué influencia tu perspectiva y ver dónde se superpone o diverge de los de los demás puede ayudar a alinear lo que ambas partes esperamos que ocurra de, por ejemplo, una simple reunión, e incluso a refinar tu comunicación y re-dirigir cómo te enfrentas a las cosas.
Y lo bueno de todo esto es que al final, cada persona tiene su perspectiva y que puede cambiar si la compartimos.
Lo que he leído estas semanas
Una frase
The ability to observe without evaluating is the highest form of intelligence. Jiddu Krishnamurti
Construyendo en público
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Nada más, por ahora, nos leemos en 15 días.
Gracias.
Muchas gracias.